Tras una invitación reiterada, este año la festividad del Carmen no la vivimos en Cádiz
capital, sino que nos fuimos hasta la querida localidad de Conil, donde se
disfrutó esta jornada, si bien el fuerte viento de levante hizo suspender en la
mañana la procesión marítima, no conseguiría lo mismo en la noche con la Reina
de los Mares por las calles conileñas.
Minutos
antes de las 21h, se abrían las puertas de la capilla del Espíritu Santo para
la salida del cortejo que abría la Cruz alzada con dos ciriales. Niños pequeños
ataviados con el hábito carmelita, así como representaciones de las distintas
hermandades y agrupaciones de Conil, seguidos por el guion corporativo y
hermanos de la corporación, así como mujeres ataviadas de mantilla.
Apenas
diez minutos después de comenzar a salir el cortejo, asomaban los ciriales,
síntoma que el paso comenzaría a salir de un momento a otro. Se escuchaban los
martillos del capataz llamando a sus cargadores a meterse debajo del paso.
Fuera se aguardaba con impaciencia.
En una
maniobra muy delicada, y realizada con mucho gusto y esmero, debido a la
estrechez de la puerta y la anchura del “pasillo” por el sale la cofradía, la
Reina de los Mares, Nuestra Señora del Carmen salió con honores a los sones del
Himno Nacional, saludada debidamente por la escolta de Infantería de Marina
para con los sones de la Salve Marinera, realizar la primera maniobra y
dirigirse al cuadro que la representa.
La
banda Pedro Álvarez Hidalgo de Puerto Real acompañó musicalmente la cofradía
con un variado repertorio en el que no faltó su marcha “Virgencita del Carmen”
de Gabriel Vadillo y otras como “Esperanza de Triana Coronada”, "Triana de Esperanza", "Madrugá Macarena" ó “Aniversario
Macareno” así como marchas más lentas como pudieron ser “Sevilla Cofradiera”.
Muchísima
gente, entre los propios vecinos de Conil así como la cantidad importante de
turistas que registra la localidad en esta época estival, todos contemplando la
maravillosa imagen de Luis Álvarez Duarte, Patrona de los marineros, y que en
Conil, al igual que en la mayoría de las localidades marineras, se le tiene una
grandísima devoción.
Momento
álgido su paso por la estrechez de la calle Cádiz, buscando su recogida y
sobretodo su subida hasta su iglesia de la calle Amargura, a los sones de “Mi
Amargura”, algo clásico en este punto para posteriormente bajo el cielo
cubierto de fuegos artificiales acercarse a su entrada con los sones de “Aniversario
en Sentencia” haciendo su entrada a poco más de las 1h10 de la madrugada del ya
17 de Julio.
Nuevamente
el Himno Nacional, así como la Salve Marinera despidieron a la Virgen
del Carmen hasta que amanezca un nuevo 16 de Julio.
Desde
aquí, no nos queda más que agradecer la invitación a esta procesión, la cual se
disfrutó con gran devoción hacía la Reina de los Mares, y que, sin duda, se
volverá a vivir.
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